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Esta ha sido una de las preguntas más comunes y genuinas que la humanidad se ha hecho al paso de los años. Y no en vano es importante que nosotros en la actualidad tomemos el tiempo necesario para encontrar respuestas a esta pregunta.
Algunos se rehúsan por completo a leer la Biblia porque no confían en su veracidad. Otros más indiferentes piensan que es un libro histórico que tiene errores o equivocaciones que contradice lo que quizás les pudiera interesar. Pero la verdad es que la Biblia es uno de los libros de antigüedad más confiables en relación con cualquier otro libro que haya sido escrito en su época. Miremos algunos datos claros y sorprendentes al respeto.
Existen varias maneras para evaluar cuan confiable y veraz es un libro antiguo. Los estudiosos se basan en los siguientes aspectos básicos:
1) ¿Cuántas copias tenemos del texto y cuán antiguas (cercanas a la escritura original) son esas copias?
2) ¿Hay confirmación de otros historiadores de la época?
3) ¿Hay correlación entre los datos históricos relatados en los escritos y los hallazgos arqueológicos de la época?
La primera de estas investigaciones tiene como propósito estudiar y comparar los manuscritos, para poder determinar la precisión y calidad de la transmisión de sus escritos. Podemos decir sin temor a equivocarnos que existen más copias de la Biblia que de cualquier otro libro de la antigüedad. Por ejemplo, solamente del Nuevo Testamento existen más de 5.800 copias en griego, de las cuales, muchas de estas copias no distan de tan solo unas décadas en relación con el escrito original. No así, otros documentos como los de Platón, de los cuales existen menos de 10 copias, y la copia más antigua de esos manuscritos data de 1.400 años en relación con el original.
En segundo lugar, existen varios historiadores que escribieron sobre la vida de Jesús. Uno de los más reconocidos de la época fue Flavio Josefo. Un erudito judío, no cristiano, del siglo primero. Él escribió en sus registros sobre Jesús, como un hombre sabio, hacedor de milagros, maestro que atrajo a muchos judíos, y muerto en la cruz por orden de Poncio Pilato.
Por último, encontramos que hay un gran número de hallazgos arqueológicos que confirman la veracidad de los relatos bíblicos, que daría suficiente para más de un artículo. Por nombrar uno de ellos, en 1960 arqueólogos hallaron en Cesarea una piedra con la inscripción ‘Poncio Pilato prefecto (hegemon) de Judea’. En esta inscripción se usa la misma palabra en griego que aparece en los evangelios para describir a Pilato, pero no así a los posteriores gobernadores. De modo que estos, aunque fueron escritos varias décadas después de Poncio Pilato nos proporcionan el título exacto que hallamos en los restos arqueológicos.
Ciertamente, estas son pruebas de gran peso para asegurar que la Biblia es confiable, pero no queremos dejar de lado una razón más que nos puede dar la misma seguridad. Y esto es, en cuanto a lo que la Biblia dice sobre sí misma en el libro de Hebreos 4: 12 “Ciertamente, la palabra de Dios es viva y poderosa, y más cortante que cualquier espada de dos filos. Penetra hasta lo más profundo del alma y del espíritu, hasta la médula de los huesos, y juzga los pensamientos y las intenciones del corazón.”
Cada persona que ha venido a ella con una mente abierta, un corazón sencillo y una actitud humilde ha encontrado una profunda transformación por el poder de sus palabras.
Es difícil resumir en pocas palabras la cantidad de hallazgos y pruebas que existen para confirmar que la Biblia es confiable y verdadera. Deseamos animarte a seguir investigando, y si tienes alguna pregunta o quisieras compartir información sobre este tema, con mucho gusto estamos dispuestos a conversar.